jueves, 7 de abril de 2011

Poema # 6


EL DESPERTAR DE MI CONCIENCIA



Anoche soñé que estaba en el desierto
Solo, completamente solo…
Y pensaba: ¡No es posible, seguro que estoy muerto!…
Ya que a mi lado no encontraba…
Ni mi cuerpo, ni señales, ni palabras.
Sólo arena; sólo arena del desierto…


Un espanto supremo me agobiaba…
Una sed de salvarme de la nada,
Un terror de saber que yo flotaba,
Y en montañas de arena me enterraba.


Yo quería despertar clamando al cielo
Y seguro mi voz fue escuchada;
Pues un viento salido de mi anhelo,
Al oído muy despacio murmuraba:


-Eres alma; eres alma buscando su morada…-
-¿Y qué he de hacer señor para buscarla?-
-¡¿Y qué he de hacer señor para encontrarla?!
-Toma tu cruz y sigue tu camino,
Toma lo que con creces yo te he dado…
¡Mas no esperes encontrar un buen destino,
En torbellinos de errores enlodados!


-El camino a la verdad y hacia la gloria,
Cuando naciste lo tenías ya trazado…
Piensa un poco, recuerda, haz memoria
Y verás que sólo tú lo has destrozado…-


El viento se apagó… quedó el silencio
Busqué mi cruz; y no pude encontrarla!...
Y sólo el desierto que era inmenso,
En llamas de terror logró ocultarla…


Agobiado de sed, miedo y espanto…
Desperté sudando y tembloroso,
Y entonces contemplé al Dios Santo,
Que en su altar me miraba bondadoso…


Terrible fue en verdad ésa experiencia…
Y hermoso el despertar de mi conciencia;
Ya no temo señor, a ése desierto…
PUES CONMIGO TU ESTÁS; Y YO YA ESTOY MUERTO.




(Autor del poema: Manuel González Ceja)
<Mi abuelo que en paz descanse>

Poema # 5

SOÑADORA


Voy a contarte una historia
Salatiel
trata de una niña soñadora
ojos de miel
Creo que en menos de una hora
la historia contare
ahora ve la bella aurora
que a continuación empezaré:

Cuenta una linda historia
sobre una soñadora
bella como ella sola
y hermosa como el clavel

Ella contemplaba con ternura
el hermoso atardecer
aquel sol de media altura
que la hacía estremecer

A lo lejos divisaba
la silueta del amor
ella nunca imaginaba
que era la voz del corazón

Incrustada en el centro
de su pecho una flecha
sabía que estaba tan adentro
y Cupido nunca espera

Ella vive ilusionada
y totalmente enamorada
parece una bella hada
con su luz abrillantada

Ella ve algo extraño
a su amor desmesurado
creo que la han golpeado
con lo feo del engaño

Ahora siempre llora
a cada día, a cada hora
el no merecía el corazón
de la linda soñadora

No terminó en final feliz
Salatiel
ni tampoco nos hizo reír
como ayer

Creo que este es el fin
que debemos aprender
de ésa niña encantadora,
ésa hermosa soñadora

Autora: Elizabeth Alejandra Rodríguez González- Copyright y derechos reservados

Poema # 4

LA DULCE AGONÍA DE AMAR



Creo que esta vez eh perdido mi corazón
la verdad ya no se, donde lo dejé tirado
creo que se fue con mi amor, en el dolor
¡pero qué va!, el era, un corazón mimado

No sé si algún día lo vuelva a ver feliz
así de majestuoso tan lleno de alegría
y es que de verdad, el es mi razón de vivir
porque yo sin él me pierdo en ésta vida

Sé que no está perdido ¡¡lo eh visto por fin!!
¿a despertado un sentimiento?, no lo sé
ahora sé que está débil; eso fue por mi
por ahora solo siento culpa, pues lo lastimé


Pero no podré regresar el tiempo jamás,
quiero recuperar mi corazón dolido
yo no lo volveré a tirar, sólo lo voy amar
Y al final triunfaré, estando siempre contigo

Autora: Elizabeth Alejandra Rodríguez González- Copyright y derechos reservados

Poema # 3

RECELO DE LA LUNA 
(soneto italiano)



Magnífica la lírica, resonante y entusiasta
Que con cobardía y recelo, a la luna le llora
Y por tiempo indefinido, se enaltece en su hora
Honrando al alba, que equilibra la casta

Sombría cobardía que naufraga del éxtasis
Que con gran sabiduría comparte con ella
Abrumador, el peso que eso conlleva
Al  exacto momento de su metamorfosis

Cobardía y recelo, estrepitosos se notan
Fructífero el aroma de la esencia del alma
Que con subyugante esfuerzo ella lo aclama

Poderoso es el momento del esperado encuentro
Y con un sueño utópico se levanta en las noches
Otorgando a los cielos lo que lleva dentro

Autora: Elizabeth Alejandra Rodríguez González- Copyright y derechos reservados

Poema # 2

La guerra del alma


La guerra del alma regocija en tu voz
La puesta de Sol se interpone en mi corazón
La búsqueda de lo perfecto no puede tu amor encontrar
La soledad aumenta en ésta tempestad

La guerra del alma en silencio sólo está
Desesperada, inquieta, se quiere liberar
La vida de un desconocido no la puedes parar
Libertinaje extrovertido en tu alma yacerá

La guerra , la guerra del alma añoro
Soledad, infinita soledad
En busca de un gran tesoro
Que el corazón no irá a entregar

La llave de lo desconocido
Bajo el manto celeste está
Cual bella flor de verano
Que jamás encontrarás

La guerra, la guerra del alma vencerá
A aquellos incrédulos
De la vida en soledad
La guerra, la guerra del alma encontrarás
Y bajo éste velo de sosiego
El mundo pronto cederá
Autora: Elizabeth Alejandra Rodríguez González- Copy right y derechos reservados

martes, 5 de abril de 2011

Poema # 1

EL SUSURRO DE MI VOZ

 

No encuentro salida a éste tempestuoso malestar
Una desértica voz invade mi alma a la hora de hablar
La soledad me invade, no me deja pensar
No puedo moverme, no puedo respirar

Ahora mi corazón le pertenece
Más, no lo puedo soportar
Yo sé que no me merece
Pero sin él no puedo estar

Susurros de mis adentros
Se escuchan en el lugar
Que mi voz, efímera en aposentos
Se quiere ahora revelar

Escuchádme, os lo pido
Pues tanta arrogancia me matará
No me dejéis, amor mío
Sin ti yo ya no puedo estar

Os lo repito, ahora y para siempre
Que sin vuestro amor, no podré vivir
Entregadme vuestra alma y subconsciente
Pues ahora, sólo eso quiero sentir.


Escuchádme, os lo pido
Pues tanta arrogancia me matará
No me dejéis, amor mío
Sin ti yo ya no puedo estar

Autora: Elizabeth Alejandra Rodríguez González.- Copy right y derechos reservados

lunes, 4 de abril de 2011

PoEmA gUiAdO a PaSoS

LUZ DE BELLADONA

1.- Flamante lucero de inhóspita quietud, cuál mar en calma bajo la tenue mirada del manto celeste; que irradia una sobredosis de esperanza y senectud.
2.- Quietud en calma, en reposo absoluto, conocimiento efímero, sutil embeleso de la noche. Luz de belladona. Se manifiesta como mar en serenidad, como una bestia salvaje domada por el bravo jinete de los cielos, cuál vívido esplendor del recuerdo de un forajido en sosiego, en quietud, como luz, luz de belladona.
3.- Sensación de poder y goce, segrega un sutil aroma a libertad, cromado de vívidos púrpuras que invaden tu espíritu y lo llenan de éxtasis y curiosidad; terso como la felpa, como la esponja marina de antaño.
4.- Sobredosis de alegría, luz de belladona, suave color a esperanza.
5.- Salvaje planta de orígenes caucásicos, tono volátil de bravura y valentía, luz que emana desde sus entrañas, luz, luz de belladona.
6.- Débil esperanza de un estático sentir, suave embriago
7.- A su bravura, fiel a su valentía, indomable, salvaje, fuerte característica de un estado baldío en senectud, luz metódica, luz estática, intocable, luz, luz de belladona.
8.- Atónita reacción de un superfluo sentir restante, en exhaustivo bienestar, refrescante aroma, sorprendente sensación, cool, sutil y versátil.
9.- Uno se siente cegado por cuan magnífica simplicidad que un ser vivo prominente de las tierras provoca en tu ser.
10.- Energía asimilada, ser pensante, ser viviente, cúmulo de estelas prominentes de la naturaleza, con el entendimiento eterno de carpe diem.
11.- Alma en pena, sentimiento profundo, estado de docilidad manifestado en su forma física, luz, luz de belladona.
12.- Fuego incandescente, luz en sobriedad, altura remanente estando en seriedad.
13.- Belladona, brillante, dócil, sutil luz de belladona, caminando por los cielos, flotando en la tempestad.
14.- Se llena mi ser de vívidos recuerdos que emanan quietud y soledad; sintiéndose uno tan en paz,
15.- Pero será, será como debió ser, tendrá lo que debió tener, el deseo será fructífero y el bienestar, inexplicable.
16.- Hojas pacíficas, verdes como el olivo de la madre naturaleza, brillante, rojo, rojo como la sangre,
17.- Emana un aire de satisfacción, prófugo de la quietud, se convence el alma del ser fluctuante.
18.-Meciéndose en el vaivén de la perpleja primavera, se manifiesta como un ser vivo; casi tan poderoso e hipnótico como ser humano en cambio rutinario, luz que emana de su ser, luz, luz de belladona.
19.- Finalmente lo veo. Una planta tan majestuosa de orígenes de antaño, utilizada con cautela y sabiduría para mejorar la salud, problemas en huesos, músculos y piel, magnífica belleza otorgada por la naturaleza.
20.- Luz, prominente luz de Belladona.

Autora: Elizabeth Alejandra Rodríguez González. - Derechos de Autor y copyright

¡Que el trabajo de otros te motive a hacer el tuyo, mejor!

"A la gente no le interesa tu vida, le interesa resolver sus problemas"   Esa frase fue el parteaguas que me ayudó a en...